Potenciar las capacidades de la administración pública para lograr una Administración moderna pasa por los datos. El sector público es un gran almacén de información de ciudadanos e instituciones, pero ¿se gestiona y gobierna correctamente en busca de una interoperabilidad y transparencia que facilite al ciudadano el acceso a servicios públicos y a la administración el prestarlos?

Phising, malware y ransomware son los principales tipos de ataques a los que se enfrenta el sector público. Las administraciones son un objetivo muy buscado por los ciberdelincuentes porque en sus manos está una amplia variedad de información confidencial de ciudadanos y otros organismos. Cuando una entidad pública es ciberatacada se están comprometiendo los datos, pero también los servicios que ofrece, y tiene una gran repercusión.

Para operar en el entorno digital actual, las Administraciones Públicas necesitan ecosistemas tecnológicos flexibles, sostenibles y rentables, en línea con otras realidades de la sociedad. A este fin sirven medidas como la consolidación de los servicios de infraestructura de procesamiento de datos y cloud o la implantación de un puesto de trabajo de nueva generación que favorezca la movilidad y la colaboración.